Buscar este blog

domingo, 1 de abril de 2012

El Escudo anti misiles de Estados Unidos en el Golfo

El día de hoy el sitio web de radio farda (una fuente de información muy seguida por iraníes en Londres, Francia y Estados Unidos) anunció los últimos detalles de la negociación entre Estados Unidos y los países del CCG para la construcción de un escudo anti misiles en el Golfo Pérsico. Mientras Leon Panetta acaba de anunciar sus recientes quejas sobre la disminución del presupuesto de Defensa por parte del Congreso estadounidense (unos 50 billones de dólares), las empresas estadounidenses, que han sido pilares de la economía de guerra en la última década, han mantenido sus ventas y contratos con los países del Golfo, principalmente Arabia Saudí y Emiratos Árabes Unidos, con quienes trabajarán en conjunto un nuevo aparato de seguridad regional estratégico.


Además de promover la seguridad económica de estas empresas, el paso de construir un escudo anti misiles regional en el Golfo se podría perfilar como una estrategia disuasiva para defender las instalaciones petroleras de dichos países ante el potencial balístico que presenta la República Islámica de Irán, ya que lo anterior viene de la mano con la nueva ronda de sanciones que Estados Unidos ha impuesto al petróleo iraní al señalar que, en palabras de Obama, "hay suficiente petróleo en los mercados internacionales para que ciertos países reduzcan la importación del crudo de aquel gobierno". Claro, para que esta versión se cumpla, se debe proteger al país de las reservas petroleras más grandes del mundo que, dicho sea de paso, ha incrementado su exportación a Estados Unidos superando a México este año.Si bien esta visión puede ser cierta, se debe mencionar que Irán cuenta con mecanismos asimétricos para volar instalaciones petroleras árabes, (plataformas en tierra y mar) que no necesariamente tienen que pasar por la ruta balística sino por que también pueden hacerlo mediante otras rutas multi direccionales en los propios territorios árabes. Guerra asimétrica pura. 

El anunció de ayer por Clinton del deseo de promover un sistema de seguridad regional en el Golfo y el anuncio de más sanciones sobre el petróleo de Irán de Obama llegan como las dos estrategias estelares para generar presión a Irán en las negociaciones del próximo 13 de abril que sostendrá con el G5 más Alemania en la cual se esperan resultados concretos en un ambiente de tensión diplomática por el asesinato de un científico iraní en meses pasados. 

El anuncio a la vez tiene la intención de que el precio del petróleo se mantenga estable en los mercados (lo cual en el mes de abril será una garantía por las negociaciones citadas entre Irán y el G5+Alemania) por lo que tenderá a que mantener la estabilidad de los mercados financieros ante una probable disminución del crudo iraní en ellos en los próximos días. En otras palabras, la intención en parte, es que Irán venda menos petróleo al mismo o a menor precio.

A la vez, sería ingenuo pensar que un sistema anti misiles en el Golfo no está dirigido al poder militar de Irán, pero el panorama de los problemas de seguridad de los países del CCG sigue siendo más amplio que solo "la amenaza iraní" al pensar en otras necesidades como la insurrección interna (las demandas sociales y civiles en Bahrein o Arabia Saudí) la seguridad alimentaria (los países del CCG dependen de las importaciones de alientos), la dependencia económica del petróleo y la poca experiencia en desastres ambientales, entre otros.

Lo que es cierto también es que un escudo anti misiles engancha aún más las políticas de seguridad regional de estos pequeños estados a la agenda estadounidense, que a la vez se ha servido de una monstruosa presencia militar en el Golfo para imponer sus condiciones y garantizar el acceso y la comercialización de los recursos energéticos de aquella zona. Desde 1975, la presencia militar estadounidense puso de manifiesto la necesidad de establecerse en el Golfo a causa de la piratería, para "garantizar" así la libre circulación marítima entre "ambas orillas del río". Tras la caída del Shah, la política exterior estadounidense fortaleció su presencia militaren el Golfo al mandar en 1995 a la quinta flota marítima del país a Bahrein, una coalición de porta aviones, tanques y embarcaciones que sirven de apoyo logístico al CENTCOM, cuya misión es "defender los intereses estadounidenses de ataques hostiles y extremistas" para promover un ambiente de seguridad en el área que comprende desde Egipto hasta Asia Central.

Finalmente, cabe señalar que el escudo anti misiles en el Golfo retoma el diseño de política exterior y de seguridad en la zona de George W Bush para defender a los países del CCG de la entonces y supuesta "amenaza iraquí". Por lo tanto y a nivel electoral, la declaración de Clinton servirá a Obama para mantenerse firme en la defensa de los intereses de Estados Unidos en la zona ante los grupos de interés que pugnan por ello en Wahisnton. Sin embargo, la llegada de más armamento a la zona nunca es una buena noticia que celebrar. Basta recordar que Irán no pudo completar hace un par de años la compra del sistema de misiles S300 por parte de los rusos quienes causando una seria molestia diplomática con Irán, echaron para atrás la transacción como gesto político y geopolítico hacia Estados Unidos e Israel bajo la tesis de la innecesaria puesta en marcha de un escudo anti misiles en Polonia. Claramente tendremos que esperar la respuesta de los países árabes ante esta invitación de Clinton, sin embargo muchos analistas apuestan no solo por la idea de que el escudo anti misiles en el Golfo ya es un hecho consumado sino que además es un hecho consumado que ha llegado para quedarse por mucho tiempo.




No hay comentarios:

Publicar un comentario